
¡Esto es la pera! Refiriéndose a algo estupendo, de nivel. Incluso la
de “pollo pera” refiriéndose a un joven
bien situado, aunque esta última
ahora se usa poco.
Pues bien, su origen es bastante inesperado, de hecho no tiene nada que ver con las peras.
Según
el libro “Hablar bien no cuesta tanto” de Pancracio Celdrán, resulta
que antiguamente, se llamaba “pera” a la renta vitalicia, que era algo
frecuente entre las clases acomodadas. También a un empleo seguro, a una
posición en general buena.
Al decir esto es la pera, nos referimos a esa desahogada posición, y decir a un joven pollo pera, es algo parecido…
Juan Díaz López-Canti asegura que la expresión ponderativa "esto es la
pera" proviene de la admiración que a los comerciantes europeos les
producía la riqueza del barrio de La Pera en Estambul.
Este dicho, que se emplea para expresar que algo es lujoso y espectacular, tiene su origen en la
ciudad turca de Estambul. Hace cuatro siglos, el centro social y económico de esta urbe se concentró en el
barrio de Péra, en la orilla norte del Cuerno de Oro. Conocido hoy como Beyoglu, este lugar era un auténtico
mercado de lujo
que suministraba a todo el mundo sedas, especias, jabones, perfumes,
maderas nobles y otros productos exóticos. De los artículos procedentes
de este barrio, pronto se empezó a decir que "eran la pera".
No hay comentarios:
Publicar un comentario